La tecnología es, principalmente, una manera de amplificar las facultades de los seres humanos. Así, el teléfono permite llevar nuestra voz más lejos. Un tren nos ayuda a llegar más rápido que si fuéramos andando. Un exoesqueleto humano, siguiendo esa perspectiva, sería la amplificación más directa de las capacidades humanas, ya que permite al usuario levantar mayores pesos, superar limitaciones locomotrices o llevar a cabo tareas con mayor rapidez. Y parece que estamos ante una tecnología con potencial: la consultora ABI Research estima que para 2030 podría ser un mercado con un valor de 7300 millones de dólares. El caso más reciente es el exoesqueleto humano desarrollado por investigadores de la Universidad Simon Fraser de Canadá. En su caso, se trata de un sistema capaz de leer las ondas cerebrales y convertirlas en movimiento. Así, una de las primeras usuarias ha sido una mujer que sufría parálisis en ambas piernas desde 2015 y pudo volver a caminar después de años en una silla de ruedas. ¿Veremos más aplicaciones semejantes en los próximos años? ¿Cuál es el futuro de esta tecnología?
Cuál es tu reacción?
1SUPER0NO0CLARO0QUIZAS

Escriba su Comentario